Ayer, me dijo algo una amiga, que me dejo, boquiabierto, algo así como si nos hubieramos conocido en otro momento... le pregunte si quería decir lo que yo quería entender, un sí basto.
Es increible como a veces encuentras pesonas en tu camino, con las que congenias, con las que sabes que tienes algo especial, pero las circustancias de la vida hacen que ya no sea posible.
Nunca sabes donde esta el clavo que te ate, por eso no guardeis nunca el martillo.
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